Esta tabla pertenece al retablo de los Martí-Crespí; pintado en el siglo XV por el mestre de Xátiva. La tablita está situada en la predela junto con otras cinco; quizá era la parte más estropeada del retablo. Una mano ignorante serró parte de la predela para colocar algo en el centro y no cabía. «Crímenes» artísticos propios de la época.

El evangelio no habla de la Dormición de la Virgen, pero sí los Apócrifos y la Tradición. La Virgen María, terminado el curso de su vida mortal fue asunta a los cielos en cuerpo y alma. Es el último dogma de fe proclamado por Pío XII en 1950. Sin embargo desde siempre el Pueblo cristiano ha creído en la Asunción de la Virgen. Su Dormición es la plataforma de su Asunción. En esta tabla ocupa el centro la imagen de la Virgen dormida y los Apóstoles la rodean rezando. San Pedro revestido asperja agua bendita sobre el cuerpo de María. Jesucristo aparece con el alma de la Virgen representada en una niña. La Asunción de la Virgen es el premio de Dios a la que fue su Madre y vivió siempre al servicio del Padre. El 15 de agosto se celebra esta fiesta, la mayor dedicada a la Virgen en la Iglesia Oriental.

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